Cuando necesitéis respirar, la hora del té; cuando queráis desahogaros, la hora del té; cuando sintáis que el mundo se os cae encima y sólo queráis desconectar, la hora del té. Sin límites, para vosotros.
No me gusta llamarlo blog, me parece algo demasiado frío. Espero que este pequeño paraíso o rincón os ayude y os sirva de guía e inspiración. En él quiero sacar a colación temas para debatir y hacer mi columna personal de opinión, aconsejar a quién lo necesite o simplemente escuchar vuestras angustias. Quiero hacer listas de temas siempre preocupantes como lugares que visitar o cosas que hacer antes de morir. Cada día subiré un diseño mío con una frase motivadora para que el día en que estéis alicaídos, sólo necesitéis visitar este pequeño remanso de paz y si os saco una sola sonrisa, estaré feliz.
¡Bienvenidos, sed libres de sonreír y compartir lo que se os pase por la cabeza!
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